Promesas de ahorro y cheques para los ciudadanos
En un evento celebrado en Miami, el expresidente Donald Trump anunció que su administración está evaluando la posibilidad de utilizar parte del dinero ahorrado gracias a los recortes en el gasto gubernamental impulsados por Elon Musk y su equipo para reducir la deuda federal e incluso distribuir cheques a los ciudadanos estadounidenses.
Trump, quien se dirigió a los asistentes del Future Investment Initiative (FII) Institute, destacó los esfuerzos encabezados por Musk y el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE, por sus siglas en inglés) para eliminar “despilfarro, fraude y abuso” en el gobierno. “Incluso estamos considerando un nuevo concepto en el que damos el 20% de los ahorros de DOGE a los ciudadanos estadounidenses y otro 20% se destina a pagar la deuda, porque los números son increíbles”, declaró Trump.
Sin embargo, DOGE no es una agencia gubernamental formal, y su afirmación de haber identificado recortes que generan $55,000 millones en ahorros ha sido objeto de escrutinio. Aunque en su página web publicó una lista de contratos federales cancelados, estos suman aproximadamente $8,600 millones en ahorros según un informe de ABC News, lo que deja en duda el origen del resto de la cifra mencionada.
Además, tanto Trump como Musk han sido criticados por exagerar ciertas denuncias de fraude. Musk ha reconocido previamente que no todas sus afirmaciones son precisas y que deben ser corregidas cuando corresponda. Entre otras aseveraciones cuestionadas, la Casa Blanca ha alegado que decenas de millones de personas fallecidas han recibido pagos fraudulentos del Seguro Social, cuando los datos oficiales indican que hay menos de 100,000 beneficiarios mayores de 100 años.
En su discurso, Trump también repitió una afirmación popular entre sectores conservadores, asegurando que el gobierno estadounidense gastó millones de dólares en condones para Gaza, un reclamo que ha sido repetidamente desmentido.
A pesar de las controversias, Trump elogió a Musk por liderar la iniciativa de reducir el gasto gubernamental y disminuir drásticamente el tamaño de la burocracia federal. “Es una persona con un coeficiente intelectual extremadamente alto”, dijo Trump sobre Musk, quien estaba sentado en primera fila durante la conferencia. “Ahora, también tiene sus defectos, se los puedo decir, pero no demasiados”.
Mientras estas propuestas generan entusiasmo en algunos sectores, también han suscitado interrogantes sobre la transparencia y viabilidad de los supuestos ahorros y su distribución. A medida que avancen los debates, se espera que haya más escrutinio sobre las cifras y los mecanismos de implementación de estas promesas.
Musk, quien lidera los esfuerzos de la administración Trump para reformar el gobierno federal y reducir el gasto innecesario, utilizó su plataforma X para confirmar que consultaría con Trump sobre la viabilidad de introducir un “Dividendo DOGE”.
La idea surgió a raíz de una sugerencia de James Fishback, CEO de la firma de inversiones Azoria, quien propuso enviar cheques de reembolso a los contribuyentes estadounidenses tras la finalización de la labor de DOGE en julio de 2026. Según Fishback, estos reembolsos serían financiados exclusivamente con una parte de los ahorros generados por el programa.
DOGE tiene como objetivo reducir el gasto federal en 2 billones de dólares durante un período de 18 meses. Fishback sugiere que el 20% de ese ahorro, aproximadamente 400 mil millones de dólares, sea devuelto a 79 millones de hogares contribuyentes a través de pagos directos, lo que equivaldría a unos 5,000 dólares por hogar.
Según Fishback, este reembolso compensaría a los contribuyentes estadounidenses por el uso indebido de sus impuestos y los incentivaría a denunciar casos de despilfarro y fraude en el gasto público. Además, argumentó que el dividendo ayudaría a restaurar la confianza entre los contribuyentes y el gobierno y fortalecería la moral fiscal.
Musk respondió a la propuesta afirmando que “consultará con el presidente” sobre la viabilidad del plan. Más tarde, en otra publicación en X, agregó: “Obviamente, el presidente es el comandante en jefe, por lo que esto depende enteramente de él”.
Ahorros de DOGE y Recortes Presupuestarios
Desde su creación en enero bajo la administración Trump, DOGE ha identificado ahorros significativos en varias agencias gubernamentales, logrando hasta el momento una reducción de aproximadamente 55 mil millones de dólares. Según el sitio web oficial de DOGE, estos ahorros provienen de la detección y eliminación de fraudes, la cancelación y renegociación de contratos y arrendamientos, la venta de activos, la reducción de la fuerza laboral y cambios regulatorios.
Uno de los mayores impactos ha sido la cancelación de contratos gubernamentales, que representa aproximadamente el 20% de los ahorros totales. Entre las agencias con mayores recortes se encuentran la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), el Departamento de Educación, la Oficina de Gestión de Personal, el Departamento de Salud y Servicios Humanos, y el Departamento de Agricultura.
Para muchos republicanos, estas agencias han sido vistas como promotoras de agendas liberales que no favorecen los intereses del país. Sin embargo, en términos presupuestarios, su impacto es mínimo en comparación con el gasto total del gobierno, que se proyecta en 7 billones de dólares para el actual año fiscal, según la Oficina de Presupuesto del Congreso.
Musk ha enfrentado críticas de parte de los demócratas y otros grupos que cuestionan su rol dentro de DOGE y posibles conflictos de interés. La Casa Blanca ha aclarado que el fundador de Tesla y SpaceX es un “empleado especial del gobierno” y actúa únicamente como asesor en la administración Trump.
Durante una conferencia de prensa junto a Trump en la Oficina Oval el pasado 11 de febrero, Musk defendió su participación en la iniciativa, asegurando que su objetivo es promover la transparencia y la eficiencia en el gobierno.
“No se puede tener una burocracia federal autónoma”, declaró Musk. “Debe ser una que responda al pueblo”.
El debate sobre la implementación del “Dividendo DOGE” y su impacto en la economía estadounidense continúa, mientras Trump y Musk evalúan la posibilidad de devolver parte del ahorro fiscal a los contribuyentes.